El gobierno nacional había advertido que el turismo estaría prohibido durante el período de aislamiento estricto de nueve días (hasta el 30 de mayo) en las zonas de alarma epidemiológica.
La recomendación a la población fue "quedarse en su casa y no viajar" durante el fin de semana largo. De todos modos, un grupo importante de personas se movilizó el viernes por las rutas, antes de que entrara en vigencia el decreto con las nuevas restricciones.
En la misma línea que Frederic se expresó el secretario Eduardo Villaba: "La restricción establece eso, que las personas no se muevan de sus casas o lo hagan dentro del rango de su domicilio", precisó el funcionario.
"Aquellos que hayan viajado lejos de su domicilio o emprendido accesiones de turismo no van a poder regresar" hasta que finalice el decreto, el 30 de mayo. "Más allá de cuándo se publicó el decreto, la gente sabía del temperamento que iba a tener, ya estaba advertida", apuntó Villalba.

De todos modos, el secretario de Seguridad aclaró que en algunos casos "las fuerzas de seguridad van a trabajar con razonablidad" en los controles de acceso, pero remarcó que "el decreto estricto amerita este tipo de comportamiento" restrictivo.