A tan solo 70 kilómetros de la capital formoseña, por la Ruta Provincial N° 1, se encuentra Misión San Francisco de Laishí , una localidad que encierra en su historia una profunda riqueza espiritual, cultural y natural. Fundada en 1901 por el sacerdote franciscano Pedro Iturralde, este pequeño pueblo es símbolo del encuentro entre culturas, donde la fe, la identidad guaraní y el respeto por el entorno conviven desde hace más de un siglo.
Actualmente, en los alrededores de la misión perduran cuatro colonias aborígenes: El Naranjito, Laguna Gobernador, El Dorado y San Antonio, cada una con su propia escuela y comunidad organizada. Estas poblaciones son guardianas de la memoria colectiva, donde aún se practican rituales y saberes que resisten al paso del tiempo.
En 1996, la zona fue declarada "municipio ecológico", un reconocimiento que refuerza su compromiso con la conservación del ambiente y la protección de la fauna y flora autóctonas. Esta designación se alinea con el espíritu franciscano de armonía con la naturaleza y cuidado de la creación.
Misión San Francisco de Laishí no es solo un sitio histórico, sino que es un refugio de identidad, donde espiritualidad, naturaleza y cultura conviven en equilibrio. Visitarla es adentrarse en una Formosa profunda, donde el tiempo parece detenerse y las historias se cuentan en voz baja, entre paredes centenarias, senderos verdes y miradas sabias.
QUÉ HACER EN MISIÓN LAISHÍ
- Antiguo convento Franciscano
Se puede visitar este convento que se inició alrededor de 1913 y fue construido en distintas etapas. Cuenta con reliquias de la época tales como fotografías, teléfonos y libros. Conserva objetos y elementos que cuentan la historia de la misión. El edificio fue declarado Monumento Histórico Nacional. En este lugar funcionaba el Registro Civil, la farmacia,el almacén de ramos generales, el centro telefónico y el Destacamento Policial.
- Escuela Santa Clara de Asís
Establecimiento fundado en 1934 por las hermanas Franciscanas Educacionistas de Cristo Rey. Funcionó como internado para las niñas aborígenes. Aún hoy viven allí religiosas que se encargan de mantener el edificio y su patrimonio cultural.
- Ruinas del Ingenio azucarero
El ingenio azucarero, fundado en 1918 fue un gran centro industrial donde se producía azúcar, harina, miel de caña y cigarros. Dejó de funcionar en 1950 y hoy se pueden visitar sus ruinas. Cerca de allí se puede visitar el aserradero que funcionaba en 1920 y el Bosquecillo de descanso, lugar donde se ubica un camping con todos los servicios para los amantes de la naturaleza y el aire libre.
- La primera capilla de la Misión
La primeras viviendas fueron construidas con palmas y adobe,que eran los materiales que podía encontrarse en la zona. Así fue como se levantó la primera capilla que hacía las veces de escuela. Este edificio se conserva y puede ser visitado en compañía de guías turísticos de la zona.
Medio siglo después de su fundación la Orden Franciscana consideró que su tarea estaba terminada y San Francisco de Laishí dejó de ser una misión. Quedó, sin embargo, un legado histórico y religioso que vale la pena conocer, una pequeña perla inmersa en una hermosa provincia con mucho para ofrecer.